Desde un punto de vista personal, como gran aficionado que soy a estos dos artes, ajedrez y cine, siempre sentí más inclinación por aquellas películas en las que el ajedrez era un mero objeto metafórico o “adorno” argumental, antes que tema principal de la película, en cuyo caso florecen multitud de viejos tópicos sobre ajedrez y ajedrecistas que suelen tratar de manera muy frívola la vida de los profesionales y que suelen dar a la sociedad una imagen del ajedrecista muy lejana a la verdad, pintando siempre a los genios ajedrecistas como locos chiflados, acomplejados y llenos de fobias y miedos. Cualquiera de nosotros conocerá algunos casos de ajedrecistas chiflados, pero ese es otro asunto, además sin duda son minoría, y podemos ver a superprofesionales de nuestro deporte que no difieren mucho de otros deportistas que tienen para el gran público una imagen mas idealizada. Como decía esa apreciación es realmente muy particular y no dudo que haya películas basadas en el ajedrez con mayor o menor calidad, y cada uno de nosotros tendrás sus gustos. Hablar de ajedrez y cine daría para muchas entradas, y sin duda esta no será la última que haga sobre el tema, tendré que ver el éxito de esta primera.
Con esta entrada me gustaría compartir con vosotros la que para mi es una de las mejores películas de la historia, y que a su vez contiene de forma más bella el ajedrez en su hilo argumental. La gran escena del ajedrez en el cine para este que os escribe no es otra que la genial escena de El Séptimo sello (1957) de Ingmar Bergman en la cuál el caballero Anonius Block (Max Von Sydow) reta a jugar una partida de ajedrez a la mismísima muerte (Bengt Ekerot)
El ajedrez en esta escena y a lo lardo de gran parte de la película, se convierte en una excelente metáfora acerca de la vida y la muerte, de la guerra, de la lucha por la supervivencia, de las dudas existenciales…Toda la película en si está plagada de metáforas y de guiños existenciales, de religión, de angustia ante la muerte y sin duda la genialidad de Bergman le hizo comprender que disponía en el ajedrez de una insuperable herramienta para plasma de forma simbólica su mensaje. No quiero aburrir más al personal sobre mis ideas filosóficas y tampoco por supuesto desmantelarle la trama del film. Mis dotes como crítico cinematográfico queda claro que no es mi fuerte, pero el lector lo agradecerá al no encontrar aquí ni una ínfima parte de lo que realmente la película puede ofrecer, y si además consigo que os animéis a verla habré conseguido el objetivo de este artículo.
5 comentarios:
Curioso el uso del cine sobre el ajedrez.Todo un descubrimiento que hace mas interesante el arte del ajedrez más cinematografico.
Carra a ver si te curas ya de tu p... (mal pensado) pie!!!
Un beso guapo
me hubiese gustado ver la partida Carrabeo jolin,saludos,a ver si la pones.
Hola Juan Carlos, resulta que en la peli no se ve la partida al completo,si acaso solo algunos movimientos sueltos, de todos modos te invito a ver la pelicula, te gustará, saludos
Excelente nota sobre la conjugación del cine y el ajedrez, dos registros en los que coincidimos.
No encuentro tu correo en el blog. Tengo algún texto que podría interesarte.
Saludo desde Buenos Aires
¡Hola! Muy buena nota. Mi fascinación por este juego es muy grande. Además, el ajedrez ha participado más en la ficción que todo el resto de juegos de mesa juntos.
Ha sufrido mínimos cambios a lo largo del tiempo, y cada vez fascina a más personas (incluyéndome). Considerando que el primer movimiento de las blancas produce veinte posibles movimientos y que después del movimiento de las negras, el segundo de la partida, se producen cuatrocientas posibilidades más, puedo entender el por qué.
Armé una nota completa sobre el ajedrez en la ficción, en mi blog de cine y literatura. Me gustaría que puedas darte una vuelta para comentarlo:
Link: http://www.viajarleyendo451.blogspot.com.ar/2013/02/el-ajedrez-en-la-ficcion-cine-y.html
Saludos!
Luciano // Seguime en https://www.facebook.com/sivoriluciano
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