En cualquier entrada de año que se precie hay una efeméride que no se puede pasar por alto. No es la primera vez que hablo en este blog del Maestro Estonio famoso por ser la parte perdedora en la famosa partida llamada La inmortal. Recordar a Kieseritzky sólo por ser el perdedor de esta partida es algo cruel y vamos a intentar compensarlo viendo una hermosa partida ganada por él que nada tiene que envidiar a su histórica derrota ante Anderssen. Antes una pequeña biografía:
Kieseritzky fue estudiante y más tarde profesor de matemáticas en la universidad de Dorpaty entre los años 1825-1839. Más tarde se mudó a Paris, la capital mundial del ajedrez dónde se haría jugador profesional de ajedrez, profesor y a la vez fundaría una importante revista de ajedrez. En ese periodo Kieseritzky estaba entre lo 4 maestros más notables de Francia y entre los mejores del mundo. Tuvo una carrera plagada de bellas partidas pero también de sonoros fracasos en torneos, parece ser que su juego poco sólido y su debil fuerza psicológica no le ayudaron a llegar a lo más alto del olimpo ajedrecístico. Kieseritzky acabaría muriendo a los 47 en Paris y para la historia quedó como la víctima de Anderssen en la famosa partida amistosa La inmortal. Veamos una brillante partida ganada por él mismo:
